Le di una patada al reloj
salieron volando las horas
Rompo las cadenas,
despliego las velas,
¡Navega y navega!
en un mar sin barreras
Que el ángel del cielo cayó
está pagando su pena
Sufre su martirio
cumple su destino
que sólo se entiende
al final del camino.
Fue cuando el nido se vació,
volando se fue la paloma
cambió de vestido
a una isla lejana
y cada mañana
levanta otro nido.
El truco del mago falló
se creía más listo que el niño.
Dentro de la caja
quedaba esperanza
un poco, justito,
sirvió lo aprendido
Y así la noche cayó
herida quedó la leona
perdió su melena
dentro de la selva
resurge más bella
pasada la prueba.
El ogro que a nadie escuchó
seguía en el fondo del pozo
Buscando la culpa
que no era la suya
feliz en el pozo
el ogro murió
Y entonces, ahora, tú y yo
andamos haciendo el sendero
me siento en la piedra
y te siento más cerca
seguimos andando
y la cima no llega.
Eso es lo que necesitamos ahora. Versos frescos que llenen el vacío con el entusiasmo de un poema inusual y ágil. Sólo queda seguir luchando para encontrar nuestro destino. disfruto de tu poesía. Saludos.
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¿Qué se te puede contestar? Gracias Manuel 🙂 Ahí seguimos caminando, aprendiendo… Un abrazo de corazón, seguimos conectados!!!!
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Por supuestos que sí.
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🙂 :*
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Romper las cadenas del tiempo ajeno, retomar el propio..inmensa libertad que nos despliega ese abanico de vida que nos espera tras la esquina…Besos al vacío
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Gran reflexión! y qué miedo nos da a veces doblar esa esquina…Gracias por comentar y aportar. Un abrazo, seguimos conectados, seguimos fluyendo 🙂
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Un poema delicioso, brisa suave y huracán al tiempo, tan lleno de poder evocador y del deseo de la vida como aventura. Muchas gracias y un saludo.
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Wow! Está hecho canción en realidad se escribió en un pentagrama 😉. Gracias por sentirlo así de bonito ❤
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